¡Cuidado, amiga...! EN EL PORTAL DE TU CASA

* (Publiqué hace años esta entrada. Por noticia de actualidad en los medios sobre un nuevo asesinato después de una segura violación, la vuelvo a publicar)

  Muchos de los ataques violentos a mujeres se producen en el momento y en el lugar donde todos 'bajamos la guardia': cuando estamos llegando a casa y entramos en ese espacio que consideramos la antesala de nuestro hogar: EL PORTAL.

 Es ahí donde subconsciente y conscientemente, nos relajamos mentalmente y dejamos de estar alerta, con el pensamiento de estar ya, dentro de nuestro territorio. Lugar y momento idóneos aprovechados por estos malnacidos para cometer estos abusos sexuales.

 TU PORTAL, ¡SI, EL TUYO!, es un lugar donde, al entrar, dejas de ser vista por el resto de transeúntes que pudieran dar la voz de alarma o intervenir en tu defensa. Suele estar menos iluminado que la calle, cuando no está directamente a oscuras. Y a determinadas horas no hay mucha probabilidad de que algún vecino vaya a aparecer 'entorpeciendo' la acción de este atacante. El violador puede entrar justo detrás de ti, antes de que se cierre la puerta, si por ejemplo, te ha estado siguiendo o esperando fuera, Luego...MIRA DETRÁS DE TÍ antes de entrar, y una vez dentro: date la vuelta, mira de nuevo, y cierra rápido.

 Pero ¡ojo!, porque el problema no acaba ahí; es más, también pudiera estar empezando... muchos de estos delincuentes, están esperando dentro, han entrado antes que tú...y 'disimulan' en la zona de los buzones, o esperan escondidos en algún recoveco (te hablo siempre de casos reales que conozco).

 De verdad, no siento el estar asustándote ahora; lo prefiero, y que a partir de ahora pases por tu portal con cierta precaución (no, miedo), a que te suceda lo que les sigue pasando a incontables mujeres, TODOS LOS DÍAS, en los portales de sus casas (suma y sigue...y la historia interminable se repite y se repite, porque a tí, ¿verdad? nunca te pasan esas cosas...bien, bien...).

  Decirte que no subas en el ascensor con un extraño puede resultar obvio; pero permíteme añadir una posibilidad más: se ha dado el caso de que el agresor se encontraba DENTRO de este, cuando la víctima quiso acceder para subir o bajar.

Pues bien, en caso de que no puedas evitar esta agresión...pónselo difícil; o mejor: IMPOSIBLE. En este blog puedes encontrar numerosos 'argumentos' para 'ayudarle' a cambiar de 'afición'. Simplemente con estar prevenida ya tienes mucho ganado. Creo que gran parte de la efectividad de su ataque se basa en la sorpresa, y en tu anulación MENTAL y FÍSICA; pero como desde aquí te animo a que no te sorprendas, sino todo lo contrario, que te prevengas...la consecuencia es fácil de predecir, y es que: no te vas a sorprender (¿sencillo, verdad?).

Suelen ser violentos -física y verbalmente- desde el principio de la agresión, para anular tu posible reacción, llegando en muchos casos a dejar a la víctima (a ti) inconsciente a base de golpes (sobretodo en la cabeza), para cometer su fechoría sin ninguna resistencia; así que... sé tú más rápida y por lo menos rompe su 'estrategia' inicial. Ensaya dos o tres técnicas básicas de defensa y ataque, pero no más; en estos momentos de pánico, tu mente va a reaccionar de determinada manera (para bien y para mal), que bloqueará tus conocimientos aprendidos de casi cualquiera de estas técnicas, y más, si éstas son complicadas.

  Esta reacción de tu cerebro ante cualquier ataque o amenaza contra tu integridad o tu vida, está explicada en el margen derecho de este blog, y es uno de los detalles más importantes que deberías conocer. NO bases tu posible defensa SÓLO en técnicas de combate, porque te puedes ver de repente, sin 'armas'; hazlo también creando y fortaleciendo tu actitud mental...a prueba de bombas. En este blog y en mil sitios más, tienes información detallada al respecto.

Y como diría uno de mis maestros a sus alumnas:

"FEAR NO MAN!" ("¡NO TEMAS A NINGÚN HOMBRE")

  (Este primer vídeo no va de ataques en portales; va de algo parecido en otro escenario totalmente diferente y muy empleado por estos capullos. ¿Qué tienen en común estas dos situaciones y lugares?:
La despreocupación y el desconocimiento de la víctima, de que está siendo observada por un delincuente que ya está presente en el 'escenario' antes de que tú llegues, y espera, pacientemente, a que su despistada presa 'suba a la tarima'. Te lo han contado desde pequeña, pero ya no te acuerdas,¿verdad...Caperucita?)

¡Cuídate!