La OSCURA REALIDAD de las VACUNAS
Prepárate para conocer la realidad de las vacunas; no de la que te han contado y te has creído ('vacuna' del covid 19 aparte, que no es una vacuna, sino algo peor, y que podrás conocer más en detalle en otras entradas de este blog). "Bienvenidos al desierto...de lo real"
NOTA: He puesto el enlace de esta entrada en los comentarios de incontables vídeos de YouTube donde tanto personal médico, como medios de comunicación pagados por el sistema médico/farmacéutico (cuando no son directamente estos mismos), siguen engañando/educando a las personas sobre las vacunas y sus supuestos beneficios (alguno de ellos, por puro desconocimiento, porque así ha sido adiestrado en su deliberada escasa educación acerca del tema); y digo supuestos, porque hasta ahora no se ha demostrado que hayan salvado ni una sola vida; ha sido todo publicidad.
Por lo que dedico también esta información a los tontolabas (si eres uno de ellos, corre a buscar el significado)- que como corderitos, os vais a pasar por aquí, porque aquí os he enviado, y que habéis respondido a mis comentarios y al de otras muchas personas, riéndoos. Personas que, más informadas y conscientes que vosotros, somos contrarias a la vacunación.
Ya me lo decía un conocido: "Yo no hago más que matar tontos, pero cada día veo más"...¡Qué razón tenía! Si después de ver esto, te sigues riendo, ya pasarías a la también exclusiva pero cada vez más poblada categoría de los... imbéciles.
Para empezar, las vacunas pueden causar y causan autismo. El mismo médico títere de los laboratorios farmacéuticos y pagado por estos, que ha silenciado esta realidad durante años, reconoce ahora la verdad, supongo que asustado por el tremendo mal que está causando su encubrimiento:
Por qué ponen ALUMINIO en las vacunas:
NOTA: He puesto el enlace de esta entrada en los comentarios de incontables vídeos de YouTube donde tanto personal médico, como medios de comunicación pagados por el sistema médico/farmacéutico (cuando no son directamente estos mismos), siguen engañando/educando a las personas sobre las vacunas y sus supuestos beneficios (alguno de ellos, por puro desconocimiento, porque así ha sido adiestrado en su deliberada escasa educación acerca del tema); y digo supuestos, porque hasta ahora no se ha demostrado que hayan salvado ni una sola vida; ha sido todo publicidad.
Por lo que dedico también esta información a los tontolabas (si eres uno de ellos, corre a buscar el significado)- que como corderitos, os vais a pasar por aquí, porque aquí os he enviado, y que habéis respondido a mis comentarios y al de otras muchas personas, riéndoos. Personas que, más informadas y conscientes que vosotros, somos contrarias a la vacunación.
Ya me lo decía un conocido: "Yo no hago más que matar tontos, pero cada día veo más"...¡Qué razón tenía! Si después de ver esto, te sigues riendo, ya pasarías a la también exclusiva pero cada vez más poblada categoría de los... imbéciles.
Para empezar, las vacunas pueden causar y causan autismo. El mismo médico títere de los laboratorios farmacéuticos y pagado por estos, que ha silenciado esta realidad durante años, reconoce ahora la verdad, supongo que asustado por el tremendo mal que está causando su encubrimiento:
Y ahora, toda la verdad, y nada más que la verdad:
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